CERRO DE ORTEGA, Col., 13 de diciembre de 2024.- Terminaron las fiestas en honor a la Virgen de Guadalupe, con solemnes misas de acción de gracias, peregrinaciones, una marcha guadalupana, tradicionales mañanitas con mariachi y cantantes locales, quema de castillo y fuegos pirotécnicos por parte de la comunidad católica del pueblo.
Con un templo abarrotado la feligresía de la bella y progresiva localidad del Cerro de Ortega, agradeció a la morena del Tepeyac todos los favores recibidos y como recordara el lector de RC Noticas el 12 de diciembre es imprescindible ver las peregrinaciones y dejarse arrastrar por el espíritu festivo que inunda todo el país, además, claro, de unirse a los cantos a la Virgen de Guadalupe.
Según la tradición la historia de la Virgen de Guadalupe comienza al aparecerse en cuatro ocasiones a Juan Diego Cuauhtlatoatzin en el cerro del Tepeyac, y una vez más a su tío. Hubo varias apariciones de la virgen de Guadalupe en las que solicitó a Juan Diego que visitase al obispo para pedirle que erigiese un templo en su honor.
El obispo exigió una prueba a Juan Diego y, en su última aparición, la virgen le dijo a este que cortase unas rosas en el Tepeyac –imposibles de conseguir en diciembre– y las guardara en su tilma o ayate (una especie de gran bolso para llevar la cosecha, típico de la zona), cuando abrió el ayate para enseñar las flores, apareció en él la imagen grabada de la virgen.
Y pues esperemos y aun nos toque estar en el próximo año 2025 celebrando a la ¡¡Virgen de Guadalupe!!